OTRO ÁNGULO DEL ESPIRITISMO
Para Morín lo
mitológico es tan necesario como lo material, porque mantiene la identidad. «Noología»
le llama a las cosas donde se encuentra lo espiritual y mitológico en su
organización y modos de ser. ¡Veamos!
En Venezuela cargamos cierto lastre en echar
nuestros destinos a ojos del más allá. María Lionza; culto espiritual con un
colosal ristre de seguidores cuyo altar en las montañas de sorte (Yaracuy)
tiene aposento. En su modo de ser tienen su forma de organización jerárquica.
Está la corte alta, con María Lionza encabezando, Guaicaipuro y el Negro I (luchadores independentistas) quienes
por encima veneran a la virgen María Cristiana. En la Corte media tienen a Erick
"El Rojo", sanguinario
nórdico quien
en su llegada pide wiski del bueno.
Por último está la corte baja, donde se
venera al famoso Ismael, delincuente terrenal y un santo espiritual
caracterizado por un tatuaje que trasluce un halcón encaramado en una moto,
símbolo de los devotos de la corte Calé o corte Malandra, llegado desde el más
allá, demanda pedidos y misiones de diversas componendas. Santa Bárbara, Simón
Bolívar, José Gregorio Hernández y
muchos otros civiles son haberes afincados en este bestial sincretismo
tradicional que con el paso del tiempo ha rozado el umbral de la cultura.
Los Rituales
Dependiendo de qué lado
se incline la balanza los hay del más variopinto según el interés del
demandante. Son ofrendas para las fuerzas naturales con frutas de a quilos le
piden al séquito, o las magias azules y violetas rebosantes se bañan en
esencias aromáticas recitando oraciones. Velones blancos, negros, verdes,
azules, amarillos, rojos y violetas se cruzan vinculando en algunos casos
rituales donde hombres y mujeres en un abrir y cerrar de ojos se ven desnuditos
teniendo relaciones sexuales. Todo ello a cambio de una vida llena de favores.
Existen, quienes le venden su alma al diablo. Decapitan ovejas negras tomando y
bañándose con su sangre. Pegar un hombre, romper un matrimonio y matar a una persona
también son formas que emplean como maleficios espirituales sin olvidar bajarse
de la mula.
El caso de Gabriel Rada (2001)
en la población de El Amparo, Estado Miranda, quien luego de participar en una
noche de ritos, orgías y círculos encendidos, su vida siguió igual sin arropar
fortuna ni poder. Dijo que otros pronto la cosecharon. Con todo esto, la
psiquiatría asegura, que quienes recurren con frecuencia a éste tipo de
búsqueda es porque en mayor o menor grado padecen algún tipo trastorno de
personalidad (alienaciones, angustias, depresiones y disociados).
Poderosos del Más Allá
La gnosis nos habla de
causa y efecto karmático. Entre Egipto y Venezuela pueden existir miles de
kilómetros, pero en ambos países una profecía anunciada pudo evitarse si se hubiesen
respetado las decisiones de los difuntos.
Howard Carter,
arqueólogo financiado por Lord Carnavon, ambos el destino les regaló la muerte
luego de socavar los restos del faraón Tutankamón. Infecciones en oídos, pulmones y garganta,
dieron paso a toda una fabulosa sentencia de “La Maldición de Tutankamón”. Al
parecer la tumba del faraón tenía inscrita en jeroglífico: “La muerte vendrá
con alas ligeras sobre todo aquel que se atreva a violar esta tumba”. Una
leyenda similar cobró vida en Venezuela cuando el 18 de Julio del 2010,
exhumaron los restos de Simón Bolívar. Una fiscal general declaró a los medios
que solo se trataba de un homenaje póstumo al libertador. Tiempo después,
murieron seguidamente adeptos a un bando de la política nacional oficial, y
fueron muchos los que evocaron la sentencia que según dijo Bolívar: “Todo el que profane mi tumba tendrá duros
sufrimientos y sus seguidores morirán en lote”. ¿Coincidencias? ¡No parece!
No obstante nació el
culto a Hugo Chávez, donde en estratos populares, afectos a su causa le tienen
altar y efigie a un hombre que fue mago de los golpes, enemigo de los
ricachones y amigo de los pobres, quien la muerte fue la única que lo sacó del
trono. Hoy, el inconsciente colectivo ha hecho un desplazamiento psíquico con
el otrora -San Hugo- como símbolo religioso de cuño moderno.
La Voz de la Ciencia
Edgar Mitchell,
astronauta que en el paseo lunar (1971)
según protagonizó un estado expandido de la conciencia al contemplar la tierra
llegando a la conclusión de que todos los planetas, estrellas, animales, rocas
y personas están vinculados de algún modo por alguna conexión invisible e
inexplicable a ojos de la lógica clásica.
La física cuántica nos habla de
universos paralelos donde una partícula puede burlar el espacio-tiempo
ubicándose en diferentes partes a la vez y cumpliendo funciones dispares. La
ciencia histórica indaga que de esa forma existe un lugar oculto en el espacio
donde Hitler pierde y en otro lugar gana la guerra.
Por su contrario, los
místicos (Budistas) sostienen que la
clave para acceder a otros universos consiste en burlar el ego mediante
técnicas introspectivas identificándolos con la totalidad. En efecto, los
médicos Andrew Newberg y Eugene D’ Aquili, descubrieron que los monjes
dejaban inactivas las regiones cerebrales de la autoconsciencia cuando
meditaban, o sea, las regiones del cerebro que nos conectan al mundo físico
exterior, ni con agujas punzantes pudieron desconectar a los monjes sometidos
al experimento ya que se encontraban en su plácida sensación de conexión con la
totalidad universal.
Vista así las
cosas, de las ciencias no hay mucho de qué dudar, aunque de los clanes espirituales
mucho que pensar cuando es el caso de sectas que granean a cada esquina, al golpe de gallo, el
timbal rumbero y la calnita en vara, buscando la premura de
esa dádiva providencial que a veces parece no llegar.
Pajaritos y brujos, chamanes de la buena nueva hacen su agosto bajo el regazo
de efigies como la del famoso "DON NICANOR"; simulando
ayuditas rumbo a una mejor vida, pero una vida
dineraria bajándose de la mula pues.
Bien sabido en ocasiones, que
susodichos lugares, apartados, con hedores pestíferos y agüitas, el baño de
caracoles o la fuma de tabacos donde siempre les dicen:- Usted tiene un
problema-, -tráigame la biografía mía porque soy bolívar-, -valla a comprarme
un kilo de ñame-, -tráigame agua del río-, y hasta se comenta, vallan a atracar
y traigan de la blanca puesto que el
Malandro Ismael dejó esa misión. Manipuladores de la buena nueva, a veces negocio
de ganster y corleones apadrinados en figuras espirituales donde la ley ni
cinco de bolas.